Las operaciones en la mina Escobal están suspendidas, pero Pan American Silver continúa haciendo trabajo comunitario, generando tensión y poniendo en riesgo a las/los defensores de derechos humanos. Firma esta petición para exigir que Pan American Silver deje de alentar la violencia.
Oponerse a la mina Escobal, de propiedad canadiense, siempre ha sido peligroso. En los últimos dos meses, seis miembros de la resistencia pacífica a la mina Escobal de Pan American Silver han sufrido ataques y amenazas de muerte. En enero, Julio David González Arango sufrió un ataque armado en su domicilio por asaltantes armados.
Esta no es la primera vez que Julio ha sido objeto de ataques. En el 2013, él se vio obligado a huir de su casa y pasó meses escondido mientras la criminalización y la violencia se intensificaban en el periodo previo al inicio de las operaciones mineras.
Este es un momento peligroso para los guatemaltecos que se oponen a la mina Escobal, y la constante injerencia de Pan American Silver en las comunidades empeora tal situación.
En el 2017 se suspendieron las operaciones de la mina, primero mediante la acción directa de dos campamentos pacíficos que detuvieron todo el tráfico relacionado con la mina, y luego debido a los tribunales que ordenaron la suspensión del proyecto hasta realizar la consulta al pueblo Xinka. Años más tarde, el proceso de consulta avanza por fin, pero el conflicto de más de una década, que ha provocado la violencia contra los defensores, sigue agudizando.
Pan American Silver está avivando las llamas de la violencia al negarse a suspender el trabajo en las comunidades, lo cual según ellas, agrava las tensiones y es una forma de coacción en el proceso de consulta en curso. Su continua injerencia viola la suspensión ordenada por el tribunal y pone en mayor riesgo a los defensores de la territorio Xinka.
Añade tu nombre para pedir a Pan American Silver que respete el derecho del pueblo Xinka a ser consultado libremente sin violencia ni amenazas, y que cese inmediatamente sus injerencias en las comunidades Xinka.
Fuente : Earthworks