El Comité por los derechos humanos en América Latina CDHAL, ve con especial preocupación el accionar sistemático de violencia de estado que se ha ejercido en los últimos días por parte de las fuerzas policiacas de Colombia luego de al menos 20 días de protestas constantes en el país.
Un paro de 20 días que convoca a todas las clases trabajadoras, estudiantiles y civiles en general a rechazar la reforma laboral, la reforma a las pensiones, la reforma tributaria, las privatizaciones, la corrupción, la ley de financiamiento, el salario mínimo, el incumplimiento en los acuerdos de paz firmados en 2016, la defensa de la protesta social y la educación, son los estandartes por las que las comunidades continúan en paro.
Los allanamientos en casas de líderes sociales antes del primer día de paro el 21 de noviembre, el asesinato del joven Dilan Cruz quien falleció el 25 de noviembre en manos de un agente policiaco del ESMAD, las tremendas golpizas a estudiantes en todo el país y la acción más reciente donde dos carros particulares que no eran policiales que con ayuda de al menos 12 policías, secuestran a dos jóvenes estudiantes de la Universidad Nacional de Bogotá el día de ayer 10 de diciembre luego de una gran manifestación, son algunos ejemplos de esta represión.
Estas acciones perjudican aún más la percepción mundial sobre el gobierno de Iván Duque quien se ha dedicado a visitar otros países, tocar guitarra y hacer deporte. El mismo quien tiene una desaprobación del 69% a nivel nacional y apoya contundentemente las acciones del ESMAD escuadrón móvil antidisturbios que a la fecha lleva 34 personas asesinadas desde su creación hace 20 años.
Finalmente, responsabilizamos a Iván Duque Marques presidente de Colombia por las anteriores y próximas violaciones en los derechos humanos y hacemos un llamado a todas las organizaciones de DDHH a nivel mundial, a la ONU, a la Comisión Interamericana de DDHH para que visibilicen y denuncien estas prácticas estatales que generan mas violencia en un país que en mas de 70 años no ha podido tener paz.