COLIMA, Col. (apro).- La asamblea de comuneros de Zacualpan, perteneciente al municipio de Comala, se pronunció en contra de la construcción de una planta hidroeléctrica sobre el río Armería, cerca del manantial denominado Ojo de Agua, con el argumento de que provocaría daños a su medio ambiente y afectaría la disposición de agua en las poblaciones de la región.
Olivia Teodoro Aranda, comunera e integrante del Consejo Indígena por la Defensa del Territorio de Zacualpan (CIDTZ), informó que la asamblea determinó por unanimidad que no se debe permitir que nadie decida por la comunidad.
“No queremos una hidroeléctrica, ya rechazamos una mina, entonces ahora menos aceptaremos una hidroeléctrica; no estamos de acuerdo en que el gobierno se meta, por favor”, expuso.
Además del posible desabasto de agua, dijo, la instalación de una planta hidroeléctrica dañaría la actividad de la pesca de chacales y otras especies acuáticas del río, de la que obtiene ingresos económicos y se alimenta una parte de la población.
“Cómo es posible –refirió– que el gobierno no vea eso, nosotros vivimos del río, yo le pediría a la gente de Colima que apoye esta lucha, porque Zacualpan no se va a dejar, va a seguir luchando para que no pongan aquí cosas que no queremos”.
El proyecto de la construcción de la hidroeléctrica es promovido por la empresa Generación Enersi SA de CV, que en marzo pasado solicitó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) la autorización de impacto ambiental.
Olivia Teodoro dijo que el acuerdo de los comuneros de Zacualpan en contra del proyecto hidroeléctrico será entregado al ayuntamiento de Comala, con la solicitud de que no se autorice la instalación de la planta en su territorio.
“Pediremos al presidente municipal que no se apruebe, porque no son sólo ellos, nosotros estamos delante de ellos, Zacualpan no lo va a permitir”, dijo.
También aclaró que hasta el momento la comunidad indígena no ha recibido información oficial sobre la pretensión de construir el proyecto, por lo que la información con la que cuentan al respecto es la que se ha publicado en los medios de comunicación.
En otro de los puntos de la asamblea, se determinó suspender de sus derechos por un año a Francisco Teodoro Peña por fraccionar y vender terrenos comunales, en contravención de la ley.
Teodoro Aranda denunció que durante la asamblea se introdujeron los comuneros Vicente Evangelista, Francisco Teodoro y Gregoria Lorenzo, quienes agredieron físicamente al comunero Francisco Rincón Lorenzo y a otros de sus compañeros, quienes los sacaron por la fuerza, dado que el primero se encontraba suspendido de sus derechos y los dos últimos fueron suspendidos en esa asamblea.
El martes, como secuela de las fricciones que se presentaron en la asamblea, la propia Olivia Teodoro dijo haber sido agredida físicamente por la dirigente priista en Zacualpan, Juana Lomelí, por lo que “nos agarramos a golpes”.