Montreal, 27 de noviembre de 2019 – Gracias a la presión de varios sectores, una delegación compuesta por representantes de organizaciones sindicales y de la solidaridad internacional e Isabel Cristina Zuleta, vocera del Movimiento Ríos Vivos Colombia, se reunió con representantes de la Caja de fondos de pensión de Quebec (CDPQ) como parte de una gira a través de Canadá para denunciar las inversiones en la represa hidroeléctrica Hidroituango.
La delegación envió a los representantes de la CDPQ testimonios detallados e informes sobre las graves violaciones de los derechos humanos y el daño ambiental causado por la construcción de la presa más grande en Colombia por parte de Empresas Públicas de Medellín. El CDPQ, describiendo el proyecto Hidroituango como «desarrollo sostenible», le otorgó un préstamo de más de $ 300 millones bajo un préstamo sindicado coordinado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Lxs miembrxs de la delegación señalaron que las autoridades colombianas ya han emitido varias sentencias que constatan graves irregularidades procesuales y técnicas en la construcción del megaproyecto, y que varios procesos judiciales y de otro tipo aún están en curso. Desde 2018, la CDPQ ha sido denunciada en repetidas ocasiones por su posible responsabilidad, a través de su financiación, por los impactos de este proyecto, que están asociados con masacres, desapariciones forzadas, daños al ecosistema del río Cauca y a los modos de vida de las comunidades afectadas. En este contexto, la CDPQ tiene toda la información creíble y necesaria en su poder para justificar la exclusión de este proyecto del acceso a sus inversiones.
Los representantes de la CDPQ reconocieron que la institución conocía varios de los problemas reportados, pero se limitaron a indicar que la información provista por la delegación sería tomada en cuenta, sin comprometerse.
Para la Sra. Zuleta, vocera de las comunidades afectadas por Hidroituango reunidas en el Movimiento Ríos Vivos Colombia, la Caja de Quebec no asume sus responsabilidades en términos de ética y respeto por los derechos humanos:
“Me siento indignada, pues a la Caja no le importa lo que sufrimos en mi territorio. Lo único que quieren son sus ganancias, aunque sepan hace tiempo que sus inversiones están causando destrucción social y ambiental. Están engañando al pueblo quebequense, diciendo que sus inversiones sirven para asegurar su futuro, que están contribuyendo a proyectos verdes, a pesar de todos los daños que su dinero está causando. La sociedad de Quebec tiene derecho a saber si sus fondos de pensiones se utilizan para la adquisición de armas y el establecimiento de bases militares en esta área.”
Al solicitar el establecimiento de un mecanismo de rendición de cuentas por parte de la CDPQ, la Sra. Zuleta presentó personalmente, en nombre de las comunidades afectadas, una queja formal ante la institución el 25 de noviembre de 2019.
Por lo tanto, el Movimiento Ríos Vivos invita a la población de Quebec a tomar una posición y firmar la petición presentada en la Asamblea Nacional de Quebec para exigir la retirada de las inversiones del CDPQ de este devastador proyecto.
