Mayo 19, 2009
Javier, desde Canadá
Congresista canadiense John McKay CON Javier Rodríguez Pardo http://orosucio.madryn.com/fotos/javier_mcKay_oro1.jpg El Congreso Mundial de Educación Ambiental (WECC) de Montreal, del 10 al 14 de mayo de 2009, reunió a más de dos mil personas de todo el mundo inscriptas en una docena de áreas temáticas: Relaciones entre ecología y economía, equidad socio-ecológica, salud ambiental, retos urbanos, ecologización de las instituciones de educación superior, la escuela en el corazón de su comunidad, la educación socio-comunitaria, interpretación del patrimonio, saber y prácticas indígenas, ética-filosofía ambiental y las visiones del mundo, el arte: imaginación, creatividad y sentido, y sobre identidad ecológica. El 9 de mayo tuvo lugar mi conferencia, con traducción a los tres idiomas oficiales del congreso: “Comunidades sublevadas frente a la expansión de las transnacionales mineras”. Centramos la disertación en el concepto “vienen por todo quinientos años después”, con énfasis en dos ejes centrales: bioprospección y prospección minera. Nuestro mensaje sobre el sistema extractivo transnacional de contaminación, destrucción regional y saqueo, concluyó después de casi cuarenta minutos de exposición y diez más dedicados a contestar preguntas.
Javier Rodríguez Pardo, desde Montreal, Canadá, 15 de mayo de 2009 Movimiento Antinuclear del Chubut (MACH), Red nacional de Acción Ecologista (RENACE), Unión de Asambleas Ciudadanas (UAC). Contacto: mailto:machpatagonia@gmail.com machpatagonia@gmail.com
En lo que a mi respecta, el eje temático para el que fui convocado se refiere a equidad socio-ecológica que dirigió Isabel Orellana responsable de la Cátedra de Investigación de Educación Ambiental de la Universidad de Canadá, http://www.uqam.ca/ UQAM, con la colaboración de Gerardo Aiquel de <http://www.web.net/~emi/> L’Entraide Missionnaire, institución sobre derechos humanos en los cinco continentes y el Grupo de Trabajo No a Pascua Lama-Montreal, Canadá. En la Universidad de Montreal intervenimos en la mesa redonda internacional sobre ecojusticia, educación ambiental y desafíos indígenas en el contexto contemporáneo de despliegue de las transnacionales extractivas, organizada por la Coalición Quebecquense sobre los impactos socio ambientales de las transnacionales en América Latina y la Cátedra de Investigación de Canadá en Educación Ambiental de la Universidad de Québec en Montreal.
La mesa congregó a una importante cantidad de interesados en las luchas contra la mega minería química. Expusimos nuestro mensaje en compañía de Nancy Yánez, abogada e investigadora del http://www.observatorio.cl/observatorio/ Observatorio de Derechos Indígenas y Ciudadanos de Chile, Marcel Claude, economista, director de Investigación de la http://www.uarcis.cl/ Universidad Arcis de Chile, Enrique Rivera, abogado, exiliado ambiental de San Luis de Potosí, México, por el caso minera San Xavier, Sergio Campusano, jefe de la comunidad indígena diaguita huascoaltina de Chile y Jethro Tulin, representante de la comunidad indígena Ipili y de la organización de derechos humanos Akali Tange Association (ATA), http://porgeraalliance.net/ Papua Nueva Guinea. La mesa redonda exploró diversos desafíos de las comunidades y poblaciones azotadas por la actividad extractiva y trató los temas educativos de esta situación en el contexto actual de globalización económica coronada por la minería transnacional. En esta línea también expusimos y fuimos moderadores del taller de “educación ambiental, movimientos sociales de resistencia y comunidades indígenas” en ámbito del 5º Congreso Mundial de Educación Ambiental. Las actividades paralelas del 5º Congreso Mundial de Educación Ambiental fueron muchas. Entre ellas destacamos el encuentro con los autores del libro http://slapp.ecosociete.org/es/node/9603 Noir Canada (Negro Canadá), Pillage, corruption et criminalité en Afrique, de los autores Alain Deneault, Delphine Abadie y William Sacher, hoy acosados por firma Barrick Gold que los demanda por una cifra varias veces millonaria, entretelones de un enredo legal que forma parte de la comidilla informática sobre todo en la parte francófila canadiense. Sostuvimos varios encuentros con los autores del libro, aportamos datos e intercambiamos acciones para hacer trabajos conjuntos. También merecen destacarse las reuniones con la coalición quebecquense al quedar conformadas con los pueblos del sur estrategias en común.
Nuestra exposición en el parlamento de Ottawa fue notoria porque dispusimos de todo el tiempo posible para informar a los congresistas de los distintos bloques políticos la realidad de esta minería y los impactos que provoca Barrick Gold en particular, su influencia sobre los gobiernos locales y el control territorial que mantiene sobre comunidades y economías regionales, el uso indiscriminado del agua y la destrucción de las fuentes que la originan. Contaminación, energía y exenciones impositivas componen el paquete expoliador que denunciamos en Canadá. El ejemplo que ofrecimos con la ley de protección de glaciares aprobada por el congreso nacional argentino y vetada por la presidente de ese país, la visita del gerente de Barrick y más tarde la reunión de su fundador Peter Munk con Cristina Kirchner, fueron datos relevantes que provocaron intercambios entre varios congresistas, que no ocultaron cierta sorpresa. En la misma línea expusimos en los medios de comunicación canadienses, practicando una libertad ausente en nuestros respectivos países latinoamericanos.
Durante más de una hora fuimos interrogados por periodistas de Radio y Televisión de Canadá, la cadena oficial que cubre todo el territorio y en ningún momento se nos prohibieron términos como hablar de “la actividad mafiosa de las transnacionales mineras canadienses.” La verdad forma parte de nuestra palabra, de modo que no hubo sorpresa al informar que a lo largo de nuestros pueblos, algunas asambleas han quemado banderas canadienses como repudio y símbolo del daño a que son sometidas las comunidades. Diversas notas en los medios de Montreal y Ottawa (conferencia de prensa en el recinto del mismo Parlamento) permitieron la difusión de nuestro mensaje. Pensar que los responsables de la conducción y administración de los países del norte ignoraban todo esto, ronda lo infantil, pero las dos semanas utilizadas en el embrión del monstruo, con nuestro discurso público en Canadá, no pudo ocultarse. De hecho, el congreso canadiense presenta en estos días (con el consenso de la mayoría parlamentaria), un proyecto de ley que regulará la actividad de las empresas canadienses en el extranjero. Les hicimos saber que rechazamos proyectos semejantes porque terminarán legitimando mayor expoliación, contaminación y saqueo.