Al Presidente de la República de Colombia
Iván Duque
ivanduque@presidencia.gov.co
Al Ministro de Relaciones Exteriores de Canadá
François-Philippe Champagne
Francois-Philippe.Champagne@parl.gc.ca
Organizaciones de la sociedad civil canadiense nos oponemos a la posible nominación del señor Jorge Londoño de la Cuesta, exgerente general de Empresas Públicas de Medellín (EPM), empresa responsable del megaproyecto Hidroituango, a la embajada de Colombia en Canadá.
El pasado 5 de julio, periódicos colombianos difundieron información según la cual el señor Londoño podría ser nombrado como embajador de Colombia en Canadá. EPM es la empresa responsable de la construcción del megaproyecto hidroeléctrico Hidroituango, llevado a cabo a pesar de la fuerte oposición de las comunidades afectadas, que desde el inicio de la obra han denunciado actos de corrupción y violación de derechos humanos y medioambientales por parte de la empresa. El señor Londoño dejó su cargo en EPM en diciembre de 2019.
La época en que el señor Londoño encabezaba EPM estuvo marcada por el desastre de Hidroituango. En la primavera de 2018, la monumental presa casi se rompió después de que un túnel perteneciente a la estructura colapsó, provocando inundaciones y forzando la evacuación de decenas de miles de personas, siendo que más de 130 mil están aún en riesgo. Desde entonces, las autoridades colombianas han confirmado que el túnel en cuestión, la galería auxiliar de desviación (GAD), no formaba parte del diseño original de la presa y que EPM lo aprobó como parte de un plan más amplio para acelerar las obras. EPM aprobó la construcción del túnel contra las advertencias explícitas de la propia junta de asesoría técnica del proyecto, y lo hizo ilegalmente, más de un año antes de obtener la licencia requerida de las autoridades ambientales. La imprudente cadena de decisiones de EPM ha puesto en riesgo la seguridad y la subsistencia de decenas de miles de personas. Las comunidades afectadas aún no han recibido una compensación adecuada por los daños sufridos como resultado de las inundaciones, que destruyeron hogares y medios de subsistencia y dejaron graves impactos culturales y psicosociales a su paso.
Es importante resaltar que, desde hace muchos años, una variedad de actores y actrices, incluidas las comunidades afectadas reunidas en el Movimiento Ríos Vivos, vienen denunciando que hay corrupción y fallas en el diseño de Hidroituango. Muchxs expertxs habían manifestado preocupaciones en relación a cambios en el diseño y construcción de la presa, alertando que eso podría resultar en un desastre, como el de 2018.
Es decir que EPM, encabezada entonces por el señor Londoño, violó las normas ambientales del país y realizó obras sin contar con los respectivos permisos y acuerdos con las comunidades. El señor Londoño también figura entre las personas investigadas por la Controlaría General de Colombia como presuntas responsables fiscales por las irregularidades en el proyecto de la hidroeléctrica Hidroituango que habrían causado un presunto detrimento de 4 billones de pesos.
Además de los daños descritos más arriba, el desastre de 2018 generó gran dolor entre familias que buscaban familiares desaparecidos. En una región con historial de crímenes y masacres perpetradas en el marco del conflicto armado, se presume que bajo las aguas de la represa de Hidroituango se encuentran cuerpos y fosas comunes que ahora no podrán ser exhumados, acabando con la esperanza de las familias de encontrar sus entes queridos.
Nos preocupamos que el nombramiento del exgerente general de EPM a embajador en Canadá sea una tentativa de obtener mayor el respaldo político y financiero hacia el megaproyecto, que ya ha contado con una cifra considerable de recursos de la agencia gubernamental canadiense Export Development Canada (EDC) y de los fondos de pensión de la Caisse de dépôt et placement du Québec (CDPQ). El señor Londoño podrá además avanzar otros proyectos mineros-energéticos a partir de las relaciones diplomáticas entre Canadá y Colombia. Esos proyectos históricamente han tenido grandes impactos en el medioambiente y en los modos de vida de las comunidades, que suelen ser alejadas de la toma de decisiones y no compensadas por los daños causados por actividades extractivas.
Las organizaciones de la sociedad civil canadiense firmantes declaramos nuestro repudio al potencial nombramiento de Jorge Londoño de la Cuesta como embajador de Colombia en Canadá, por su falta de buen juicio y por todo el dolor e injusticia en que estuvo involucrado durante el tiempo en que asumía la gerencia de EPM.
Solidaridad con las comunidades afectadas del Movimiento Ríos Vivos!
Atentamente,
Rosa Peralta, del Comité para los derechos humanos en América Latina (CDHAL)
Organizaciones firmantes:
Campagne lavons les mains sales de la Caisse
Centro international de solidarité ouvrière (CISO)
Christian Peacemaker Teams – Canada
Comité para los derechos humanos en América Latina (CDHAL)
Common Frontiers
Grupo de Trabajo Colombia de Common Frontier
Conseil central Montréal métropolitain de la CSN
Inter Pares
KAIROS: Canadian Ecumenical Justice Initiatives
La Alianza de Solidaridad y Acción por Colombia (CASA)
MiningWatch Canada
Proyecto de Acompañamiento y Solidaridad con Colombia (PASC)
Para la versión en inglés, haga clic aquí.
Foto : La República