En la ciudad de Panamá, tuvo lugar del 24 al 27 de septiembre el primer encuentro continental “Agua, Energía y soberanía de los pueblos” organizado por el Movimiento de afectados por represas en Latinoamèrica MAR. El MAR es un referente de articulación continental que agrupa a movimientos por la defensa del agua contra las represas de distintos países de Latinoamérica, quienes además luchan por un nuevo modelo energético popular. A este encuentro asistieron más de 100 participantes de diferentes países de América latina e invitados de África y de América del norte quienes intercambiaron experiencias de lucha y construyeron estrategias de acción para los próximos 5 años.
La apertura se dio en el marco del primer encuentro de mujeres afectadas por represas que reunió a defensoras, indígenas y campesinas de más de 20 países, contando con una participación mayoritaria en el encuentro continental. El eje de este espacio fueron “Las violaciones de las empresas en la vida de las mujeres” frente al modelo capitalista, patriarcal y extractivista. Se enfatizó la importancia de la organización de las mujeres como eje fundamental para la construcción y fortalecimiento del MAR y de la articulación a nivel local, nacional e internacional. Una delegación canadiense fue invitada a participar al encuentro continental, contando con la participación de mujeres indígenas de la nación Anishnabe y Wetʼsuwetʼen, que compartieron la resistencia de los pueblos indígenas frente al colonialismo, genocidio y despojo que han vivido históricamente por el estado canadiense.
Tuvimos la oportunidad de conversar con una de las organizadoras del encuentro:
“Mi nombre es Damaris Sánchez y soy parte de la Red Nacional del agua de Panamá y vivo en la provincia de Chiriqui un sitio afectado por represas y por múltiples hidroeléctricas. En ese marco es que somos parte del Movimiento de Afectados por Represas de Latinoamérica con quienes organizamos este 1er encuentro de afectados por represas que se está realizando en Panamá del 24 al 27 de septiembre. Hemos celebrado un primer encuentro de mujeres afectadas por hidroeléctricas y por proyectos extractivistas que nos ha permitido intercambiar nuestras vivencias, nuestras experiencias, nuestras esperanzas y nuestros de cambiar este mundo para dejar a las futuras generaciones un mejor planeta, tratando de sensibilizar al pueblo acerca de lo valiosos que es el agua, el bosque y que entendamos que el agua es un bien necesario para toda la humanidad y para todos los seres vivos”.
Una de las conclusiones de este encuentro es que no es posible denunciar la violencia sobre los ríos y las aguas, sin visibilizar la violencia frente a las mujeres en los territorios y al interior de los movimientos sociales. También se mencionó que la lucha por la defensa del territorio, es también por la defensa del agua y por la soberanía alimentaria. Así, con miras al próximo IV encuentro internacional de afectados por represas que tendrá lugar en 2021, el desafío es de continuar fortaleciendo los procesos organizativos y amplificar la voz de las mujeres en el seno del MAR. Este encuentro continental fue además un paso para seguir construyendo solidaridad y un frente de articulación entre las luchas del sur y del norte.
Foto: MAR