Noticia parecida en Reporte Minero (Verónica González Encina) el 10 de febrero de 2023
Luego de permanecer cerrada por 11 días a causa de disturbios civiles, la minera retomó actividades con mayor seguridad.
Perú se encuentra en un complejo escenario político lleno de disturbios civiles. Entre los motivos, además de la demanda por nuevas elecciones presidenciales, se encuentra el malestar por los altos niveles de pobreza en un territorio rico en cobre, donde sus residentes acusan que la minería no beneficia a las comunidades cercanas a las operaciones.
Luego de permanecer cerrada por 11 días a causa de manifestaciones en contra de la minera, la mina peruana de cobre Antapaccay de Glencore reanudó sus operaciones.
Antapaccay es una de las minas más grandes de Perú, produciendo casi 136.000 toneladas de cobre entre enero y noviembre de 2022.
Frente a los actos de protesta, desde la minera se declaró que “nuestra empresa es respetuosa del derecho a la protesta, sin embargo, de ninguna manera comparte estos actos repudiables y delincuenciales que ponen en riesgo la integridad de nuestros trabajadores y de la población civil en general”.
Según lo informado por Glencore, las operaciones fueron retomadas con mayor seguridad luego de que algunas protestas disminuyeran. Situación muy distinta fue la que reportó esta semana la minera Buenaventura que tuvo que paralizar sus operaciones luego de que un grupo de manifestantes atacó la faena destruyendo las instalaciones en el contexto de la inestabilidad política que atraviesa el vecino país.
Así como Las Bambas y Hudbay, Antapaccay tuvo que suspender el transporte de mineral por los bloqueos en el sur de Perú. En ese contexto, a fines de 2022, la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE) alertó que el bloqueo de las vías en la zona pone en riesgo el 30% del despacho de cobre del país, ya que impide el normal funcionamiento de las tres operaciones antes mencionadas. Así, solo en el caso de Las Bambas, se estimó que la paralización genera pérdidas diarias de aproximadamente US$ 10 millones.
